por Guillermo Correa
Un gran número de compañeras y compañeros llegaron hasta el Club Orompello, ubicado en el corazón del cerro Esperanza en Valparaíso, para dar la bienvenida y solidarizar con Mauricio Hernández Norambuena, y al mismo tiempo manifestar su compromiso de seguir luchando por la libertad del “Comandante Ramiro”.
Con el sereno rostro de Mauricio como telón de fondo, junto a la frase “Bienvenido Mauricio” sobre unas cadenas rotas que simbolizan la lucha por lograr su liberación, se dio inicio a este acto político-cultural en donde se hicieron presentes numerosos artistas populares de la región. El primero en entregarnos su arte fue Patricio Manns, el cual interpretó varias de sus extraordinarias canciones, tales como “Llegó volando”, “El cautivo de Til Til””, y “Arriba en la cordillera”.

Las conductoras del evento fueron entregando antecedentes sobre la vida de Mauricio Hernández, como asimismo contextualizando los momentos históricos en que le tocó vivir, a partir de los cuáles fue tomando las opciones de vida que lo llevaron a comprometerse política y militarmente, para enfrentar en forma resuelta y decidida la dictadura cívico militar.
En parte de su intervención expresaron:
“Esta Peña solidaria es por nuestro compañero Mauricio Hernández Norambuena, Comandante Ramiro, en el Club Orompello, ubicado en este cerro Esperanza, que le hace honor a su nombre porque siempre ha sido un territorio de lucha por un país mejor. Tiene hoy mucha significación, porque acá nació, creció, se educó y se comprometió políticamente, dispuesto a entregar todas sus capacidades por un Chile nuevo, por una auténtica democracia y el socialismo
El país y el mundo han conocido que Mauricio no titubeo ni un instante en prepararse para combatir a la dictadura en su propio terreno, el militar, que había impuesto la cultura de la muerte y que a través del genocidio intentaba exterminar a nuestro pueblo. Su nombre de combatiente destacado era “Comandante Ramiro”, pero nosotros, los de la “rama cultural” y los vecinos del cerro lo conocimos como el deportista, el amigo y el compañero comprometido (…) Mauricio en este minuto está presente en este espacio…esta Peña no solo es de solidaridad de clase, sino también de resistencia a los intentos de seguir deformando, silenciando, la verdadera historia, que la deben escribir los pueblos, como lo dijo el compañero Allende.”

Los números artísticos continuaron intercalándose al libreto, mientras un ambiente de camaradería y fraternidad se expresaba en las y los asistentes, quienes repletaron la cancha y la tribuna del club Orompello. Así se hicieron presentes en el escenario Lia y Jaime Jelves; Alda Carrasco Chacana; Grupo Raíces Urbanas, Tito Tapia; Jano Banda; Wenuwen; Fernando Saavedra; Grupo Mestizo y Carola Muñoz.

Laura Hernández hizo uso de la palabra a nombre de la familia para manifestar:
“Estos últimos diez días han sido muy intensos y si bien es cierto que hace 17 años que esperábamos que Mauricio retornara a la patria, en que pudieran cambiar sus condiciones inhumanas de encarcelamiento injustas, esto ocurrió abruptamente y, como se podrán haber enterado, esto tiene sus motivos, ya que Mauricio prontamente iba a recibir beneficios en Brasil. Por eso, tanto allá como acá, se unieron las fuerzas del mal pensando en tenerlo mucho tiempo encarcelado. Nosotros estamos convencidos que la resistencia y la lucha que han tenido, no solo los compañeros, los amigos y su familia, sino el propio Mauricio, permitirá seguir adelante hasta lograr su libertad. El nos manifestó en su primer día, al llegar a nuestro país, que se sentía feliz de estar junto a su familia y junto a toda esta familia extensa de la que ustedes son parte.”
En esta ocasión aprovechó de leer un saludo de Mauricio, cuyas palabras fueron escritas el 22 de agosto en la prisión de Santiago, en donde expresa:
“Vuelvo entero, vuelvo digno, vuelvo a reencontrarme con la familia, con los amigos y compañeros, y vuelvo a sentir toda la solidaridad, esta misma que me ayudó a resistir en las mazmorras de Brasil. Vuelvo para escarbar la tierra y besar a mis hermanos muertos. Vuelvo para mirar de frente la sonrisa de mis hermanos vivos. Vuelvo pleno y firme, regreso con la memoria intacta a reconstruir nuestra historia. Desde esta pequeña ventana miro hacia el sur, más allá del Biobío y mi corazón se exalta con la lucha de los hombres de la tierra.”
Luego de escuchar con atención y en silencio el mensaje enviado por Ramiro, las y los presentes, corearon enérgicamente¡LIBERAR, LIBERAR A MAURICIO POR LUCHAR!
Mauricio Hernández Norambuena, junto a sus familiares, vecinos y vecinas, compañeras y compañeros del cerro Esperanza y otros territorios, con la esperanza de la libertad y con la frente en alto y la dignidad del combatiente popular, estuvo presente en cada una de las personas que repletaron el Club Orompelllo.