Es en la estela de las Jornadas de Julio cuando los trabajadores se vieron obligados a confrontar directamente con las implicaciones de su aislamiento creciente respecto a la intelectualidad. Los 3 y 4 de julio, los trabajadores industriales de Petrogrado, al lado de algunas unidades de la guarnición local, marcharon en dirección del Palacio de Tauride en manifestación pacífica con el objetivo de hacer presión sobre el Comité Ejecutivo Central (CEC ) de los soviets, que estaba entonces compuesto mayoritariamente de mencheviques y SR (Socialistas Revolucionarios), para que pusiera un final al gobierno de coalición con los representantes de las clases poseedoras y asumiera la iniciativa de tomar el poder . En otros términos, que formase un gobierno de los soviets, en el interior del cual solo estuvieren representados los trabajadores, los soldados y los campesinos. Pero se produjo una cosa impensable: no solamente la dirección menchevique y SR rechazó tener en cuenta la voluntad de los trabajadores sino que se mantuvo a distancia cuando el gobierno, en el seno del cual estaban representados esos dos partidos, lanzó una ola represiva contra los trabajadores, los bolcheviques y otros socialistas de izquierda opuestos al gobierno de coalición. El ministro del interior, directamente responsable de esa política, no era otro que el dirigente menchevique I.G. Tsereteli
Revolución rusa
A 44 años del Golpe, a 100 de la Revolución Rusa
Recuperar el programa internacionalista
Nuevamente el imperialismo yanqui en busca de una nueva orientación que lo fortalezca como imperialismo dominante en medio de la crisis capitalista, vuelve a agitar su puño guerrerista sobre la región con amenazas de salidas militares como lo hizo recientemente contra Venezuela. Y es que pese a que todos los disciplinados gobierno latinoamericanos al imperialismo, incluido el gobierno de Maduro, pretenden posar de democráticos, saben que el desarrollo de las crisis regionales y de la lucha de clases llevará a la confrontación violenta y para ello necesitarán echar mano de las salidas golpistas
Revolución Rusa: La intelectualidad y la clase obrera en 1917 (I)
por David Mandel//
Mikhail Terechtchenko (1886-1956), industrial del azúcar y Ministro de Asuntos Exteriores del último gobierno provisional no parloteaba cuando preguntó al marinero que le escoltaba a la prisión después de la toma del Palacio de Invierno: ¿Cómo os vais a arreglar sin la intelectualidad? 1/De hecho, esta cuestión se refiere a un proceso clave de la revolución de 1917: el creciente distanciamiento de la intelectualidad, en particular de la fracción de esta última que se calificaba de democrática o de socialista, hacia la clase trabajadora 2/. Los historiadores se han dedicado relativamente poco a este importante aspecto de la revolución. Sin duda, ello se explica por la visibilidad de la intelectualidad en las cumbres del partido bolchevique, en el interior de su comité central. Sin embargo, eran raros los miembros de la intelectualidad en todos los niveles del partido –ciudades, distritos, lugares de trabajo-: en 1917, de forma aplastante, la composición social y la orientación política del partido bolchevique eran proletarias.
Nuestra Revolución Rusa
por Charles Michaloux y François Sabado//
El centenario de la Comuna de París, en mayo de 1971 en París, estuvo marcado por una gran marcha en la que la muy reciente energía de Mayo del 68 flotaba en el ambiente de la primavera parisina delante del cementerio del Père-Lachaise y el Muro de los Federados. Era la celebración de un evento fundador pero que terminó en derrota. Si bien el recuerdo de la masacre de los Comuneros por los Versallescos y la burguesía parisina otorgaba a ese centenario toda su gravedad, estaba impregnado por la feliz esperanza de la juventud que salió a la calle aquel día.
La Revolución Rusa y el movimiento negro estadounidense
por James P. Cannon//
Durante todo el período de los primeros diez años del comunismo estadounidense, el partido estaba preocupado por la cuestión negra y gradualmente llegó a una política que era diferente y superior a la del radicalismo estadounidense tradicional. Sin embargo, en mis memorias publicadas concernientes a ese período, la cuestión negra no aparece en ninguna parte como tema de controversia interna entre las fracciones principales. La explicación era que ninguno de los dirigentes estadounidenses planteó alguna nueva idea sobre esta cuestión explosiva por cuenta propia; y ninguna de las fracciones como tal propuso ninguno de los cambios de política, actitud y forma de abordar la cuestión que se habían realizado gradualmente cuando el partido llegó al fin de su primera década.
La demasiado breve convergencia entre la revolución rusa y la ecología científica
por Daniel Tanuro//
16 de enero de 1919. La guerra civil está en su apogeo. Las tropas blancas del almirante Koltchak han franqueado los Urales y progresan hacia Moscú. La porción del territorio controlada por los rojos se reduce progresivamente. Los soviets están en peligro de muerte. Sin embargo, en su oficina del Kremlin, Lenin se toma tiempo para debatir sobre… la protección de la naturaleza.
Lenin: ¿Se debe participar en los parlamentos burgueses?
«. . . rechazar del modo más categórico todo retorno a los métodos de lucha parlamentarios, los cuales han caducado ya histórica y políticamente. . .»
La revolución rusa no fue una utopía
por Francisco Fernández Buey//
Fue la revolución rusa de octubre de 1917 una utopía? Los contemporáneos de aquella revolución tuvieron tres respuestas diferentes para esta pregunta.
La primera respuesta dice: sí, fue una utopía en el sentido peyorativo de la palabra; fue desde el principio una fantasía, una ilusión, porque socialismo es sinónimo de abundancia, de gran desarrollo de la industria y de las fuerzas productivas en general, y la Rusia de entonces, el topos en el que se pretendía construir el socialismo, era un país económica y culturalmente atrasado (por lo menos en comparación con la Europa occidental de la época). Según esto, los bolcheviques soñaban despiertos. Tal fue la respuesta de la mayoría de los teóricos marxistas de la socialdemocracia alemana de entonces.
Las mujeres de 1917
por Megan Trudell//
En el Día Internacional de la Mujer de 1917, las trabajadoras del textil del barrio de Vyborg, en Petrogrado, se declararon en huelga, abandonaron las fábricas y fueron de taller en taller, en piquetes de cientos de personas, para extender la huelga y enfrentarse violentamente a la policía y el ejército. Poco cualificadas, mal pagadas, obligadas a trabajar durante 12 o 13 horas por jornada en un entorno sucio e insalubre, las mujeres pedían solidaridad y reclamaban a los hombres que actuaran, especialmente a aquellos trabajadores cualificados que trabajaban en empresas de maquinaria y metalúrgicas, que se consideraban los más conscientes políticamente e influyentes socialmente de la mano de obra de la ciudad. Las mujeres lanzaron palos, piedras y bolas de nieve contra las ventanas de las factorías y forzaron la entrada en los centros de trabajo, exigiendo el fin de la guerra y el retorno de sus hombres del frente.
León Trotsky: La agonía de la monarquía
La dinastía cayó apena sacudirla, como fruto podrido, antes de que la revolución tuviera tiempo siquiera a afrontar sus miras más inmediatas. La imagen que trazamos de la vieja clase dirigente no sería completa si no intentáramos exponer cómo se enfrentó la monarquía con la hora de su hundimiento.
Isaac Deutscher: breve historia de la revolución rusa
La revolución de 1917 estalló en plena guerra mundial en la que Rusia, aunque perteneciendo de hecho a la coalición victoriosa, sufrió severas derrotas. En cierto sentido algunos consideran que la revolución se vio propiciada por el fracaso del ejército zarista. Pero la realidad es que la guerra no hizo más que acelerar un proceso que desde hacía varias décadas estaba erosionando el viejo orden establecido; aceleración que ya se había visto más de una vez intensificada por otras derrotas militares. El zar intentó evitar las consecuencias de su fracaso en la guerra de la concediendo la emancipación de los siervos en 1861. La derrota en la guerra ruso-japonesa de 1904-1905 se vio inmediatamente seguida por un annus mirabilis de revoluciones. Tras el desastre militar de 1915-1916 el movimiento empezó de nuevo desde el punto muerto al que había llegado en 1905, con la diferencia que en 1905 la insurrección de diciembre de los obreros de Moscú, había significado la palabra fin de la solución, mientras que en 1917 la revuelta armada Petrogrado fue la primera chispa. La organización más importante creada por la revolución de 1905 1/ fue el llamado «consejo de representantes obreros» o soviet de San Petersburgo 2/. Tras un intervalo de doce años, los primeros días del nuevo alzamiento, aquella organización volvió de nuevo a vitalizarse para convertirse en el foco principal del gran acontecimiento que avecinaba.
Lucha contra el capital financiero: el repudio de la deuda externa en el corazón de las revoluciones de 1905 y de 1917
En su autobiografía, León Trotsky explica la detención de toda la dirección del Soviet de San Petersburgo el 3 de diciembre de 1905 por la publicación de un manifiesto en el que los miembros de ese consejo elegido llamaban al repudio de las deudas contratadas por el régimen del Zar. Explica igualmente que este llamamiento de 1905 al no pago de la deuda acabó por ser concretado a comienzos del año 1918 cuando los soviets adoptaron el decreto de repudio de las deudas zaristas:
Trotsky: la idea de la revolución palaciega
¿Por qué las clases dirigentes, que buscaban el modo de evitar la revolución, no hicieron nada por librarse del zar y de los que le rodeaban? No dejarían de pensar …
El encuentro de Lenin y Trotsky: la célebre Tesis de Abril
por Ramón Sarmiento//
Las tareas inmediatas de la revolución rusa eran de carácter democrático-burgués: instaurar una república democrática que pusiera las bases para un desarrollo avanzado de la industria y la cultura. Pero la burguesía rusa, débil, había llegado tarde al desarrollo histórico, constreñida en su avance por las burguesías más fuertes de Europa y Norteamérica.
Bolchevismo y Stalinismo, de León Trotsky
La crisis que atraviesa el régimen capitalista en Chile y el mundo ha desatado una, a veces soterrada campaña y en otros momentos abierta campaña en contra del comunismo …
¿Qué consiguió la Revolución Rusa y por qué degeneró?
por Alan Woods //
«Independientemente de lo que se piense del bolchevismo, es innegable que la Revolución Rusa es uno de los mayores acontecimientos de la historia humana, y el gobierno de los bolcheviques un fenómeno de importancia mundial«. John Reed, 1 de enero de 1919. (J. Reed, Diez días que estremecieron al mundo).
El colapso de la URSS fue presentado por los defensores del capitalismo como el equivalente a la victoria final de la «economía de libre mercado» sobre el «comunismo”. Hace 25 años esto produjo una ola de euforia entre la burguesía y sus apologistas. Se habló del fin del socialismo, del fin del comunismo e, incluso, del fin de la historia y, desde entonces, hemos presenciado una ofensiva ideológica sin precedentes contra las ideas del marxismo a escala mundial. Esta exuberancia irracional no tuvo límites.
Editorial: Las Lecciones del 2016
El año que termina resultó siendo decisivo. La crisis de los partidos patronales, especialmente aquellos agrupados en la Nueva Mayoría, terminaron por quebrar su capacidad electoral y se abrió una grieta en el régimen por donde comienza a expresarse el descontento de las masas. Son las masas y no los actos electorales, los verdaderos protagonistas de este año.
León Trotsky: si EE.UU. se hiciera comunista
Si Norteamérica se hiciera comunista como consecuencia de las dificultades y problemas que el orden social capitalista es incapaz de resolver, descubriría que el comunismo, lejos de ser una intolerable tiranía burocrática y regimentación de la vida individual, es el modo de alcanzar la mayor libertad personal y la abundancia compartida.