El 20 de agosto de 1940, León Trotsky fue asesinado por el agente estalinista Ramón Mercader en ladelegación Coyoacán en la Ciudad de México. El acceso de Mercader al gran revolucionario fue posible por su relación con Sylvia Ageloff, una miembro del Socialist Workers Party (SWP). En el periodo posterior al asesinato, Ageloff se presentó como una víctima inocente de la duplicidad de Mercader, una afirmación que nunca fue desafiada por el SWP.
Esta serie de artículos constituye la primera investigación sistemática de papel de Ageloff por parte del movimiento trotskista y continúa el trabajo de la investigación Seguridad y la Cuarta Internacional del Comité Internacional de la Cuarta Internacional. Se publicóen cuatro partes.
El 20 de agosto de 1940, León Trotsky fue asesinado por el agente estalinista Ramón Mercader en la delegación Coyoacán en la Ciudad de México. El acceso de Mercader al gran revolucionario fue posible por su relación con Sylvia Ageloff, una miembro del Socialist Workers Party (SWP). En el periodo posterior al asesinato, Ageloff se presentó como una víctima inocente de la duplicidad de Mercader, una afirmación que nunca fue desafiada por el SWP.
Esta serie de artículos constituye la primera investigación sistemática de papel de Ageloff por parte del movimiento trotskista y continúa el trabajo de la investigación Seguridad y la Cuarta Internacional del Comité Internacional de la Cuarta Internacional. Se publicó en cuatro partes.
El 20 de agosto de 1940, León Trotsky fue asesinado por el agente estalinista Ramón Mercader en ladelegación Coyoacán en la Ciudad de México. El acceso de Mercader al gran revolucionario fue posible por su relación con Sylvia Ageloff, una miembro del Socialist Workers Party (SWP). En el periodo posterior al asesinato, Ageloff se presentó como una víctima inocente de la duplicidad de Mercader, una afirmación que nunca fue desafiada por el SWP.
Esta serie de artículos constituye la primera investigación sistemática de papel de Ageloff por parte del movimiento trotskista y continúa el trabajo de la investigación Seguridad y la Cuarta Internacional del Comité Internacional de la Cuarta Internacional. Se publicará en cuatro partes.
El es de noviembre marcó un récord en la propagación de la pandemia. Diecisiete millones de personas dieron positivo al coronavirus en todo el mundo y más de 272.000 murieron del virus, casi el total de soldados muertos en la más mortal batalla de la Primera Guerra Mundial, la batalla del Somme de cinco meses. Mientras miles de millones se preparan para un invierno de dificultades y enfermedad, las bolsas de valores globales están celebrando su mejor mes en 33 años. En noviembre, el índice bursátil Dow Jones Industrial Average alcanzó los 30.000 puntos por primera vez.
Un análisis inicial de los datos electorales del voto presidencial 2020 desmiente la narrativa racialista de la política estadounidense promovida incansablemente por el Partido Demócrata. Varios aspectos de los datos electorales son particularmente relevantes en mostrar el predominio de los factores socioeconómicos en el resultado.
La aparición del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, con Donald Trump ayer se contará en la historia como una de las visitas más degradantes y aduladoras de un jefe de Estado latinoamericano a Washington.
López Obrador, conocido en México como AMLO, ganó una elección aplastante en 2018 prometiendo que podría unir a los trabajadores, campesinos mexicanos y las secciones “progresistas” de la clase capitalista para poner fin a la austeridad y oponerse a las décadas de explotación por parte de las corporaciones estadounidenses. La visita de AMLO a Washington confirma que todas esas promesas son un fraude, ya que los intereses de todos los sectores de la clase dominante de México son completamente antagónicos a los de las masas trabajadoras del país.
Desde el inicio de la pandemia de coronavirus, el mundo se ha acostumbrado a ruedas de prensa diarias en la Casa Blanca en que un Donald Trump con el ceño fruncido demuestra su impactante ignorancia y promueve curanderismo, mientras los expertos médicos contradicen sus justificaciones disparatadas y anticientíficas de un rápido regreso al trabajo.
El lunes por la noche, Donald Trump anunció por Twitter que, debido al coronavirus, el Gobierno frenaría toda la inmigración a Estados Unidos, un paso sin precedente en la historia del país.
Esta atroz acción propia de un Estado policial es un intento desesperado del Gobierno de Trump para distraer de la criminalidad de la respuesta de la clase gobernante al coronavirus.
La propuesta de Trump de una “pausa” de 60 días en la inmigración incluiría todas las solicitudes de visas de inmigración y residencia permanente. No obstante, excluiría las visas por invitación para los jornaleros agrícolas, acorde a las demandas de las grandes empresas agrícolas.
La persecución del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, en el tribunal de magistrados de Westminster en Londres, es una burla de la justicia que por siempre manchará a los Gobiernos de EE. UU., Reino Unido, Australia, Suecia y Ecuador, así como a todos los individuos involucrados.
En la frontera entre EUA y México, las dos principales clases sociales bajo el capitalismo —la clase capitalista y la clase obrera— le están mostrando a la humanidad las dos alternativas para su futuro.
La clase capitalista ha movilizado a miles de soldados estadounidenses fuertemente armados para colocar alambres de púas a lo largo del desierto y dispararles gases lacrimógenos a los refugiados que buscan asilo. Los inmigrantes que cantaron “somos trabajadores internacionales” cuando marchaban miles de kilómetros desde Honduras como parte de la caravana migrante el año pasado se encuentran ahora apiñados en ciudades de carpas a pocos metros de la frontera con Estados Unidos.
En el centro de la histeria antirrusa encabezada por el Partido Demócrata, se encuentra el argumento de que Rusia y su presidente, Vladimir Putin, son una amenaza para “nuestra democracia”.
Los días 2 y 3 de abril de 2018, el Partido Obrero (PO) de Argentina organizó una conferencia en Buenos Aires en nombre del Coordinadora por la Refundación de la Cuarta Internacional (CRCI).
La consigna de «refundar» o «reconstruir» la Cuarta Internacional, fundada por León Trotsky en 1938, no es una novedad. El Partido Obrero ha estado involucrado en tales esfuerzos durante unos 45 años, desde su alianza con la OCI francesa (Organización Comunista Internacionalista) de Pierre Lambert en la década de 1970 en lo que se conocía como CORCI (Comité de Organización para la Reconstitución de la Cuarta Internacional). Esa aventura fracasó cuando Lambert se orientó al Partido Socialista en Francia y a todo tipo de movimientos nacionalistas burgueses de derecha en América Latina, mientras denunciaba a sus antiguos aliados del CORCI como agentes de la policía. Posteriormente, el PO se aliaría con la tendencia pablista extrema en Argentina dirigida por Nahuel Moreno en un intento igualmente abortivo –y aún más efímero— de «refundación». Seguir leyendo El Partido Obrero en Argentina busca “refundar” la Cuarta Internacional en alianza con el estalinismo→
Bajo las órdenes directas del presidente Donald Trump, los oficiales migratorios de Estados Unidos se han rehusado a aceptar las aplicaciones de asilo de casi 200 inmigrantes que buscan escapar de la violencia, la guerra y la pobreza en América Central, obligándolos a acampar de forma improvisada en la frontera entre San Diego y Tijuana. Seguir leyendo La barbarie de Trump: Estados Unidos niega el derecho de asilo→
Después de meses de planeación y coordinación deliberadas con la policía, la demonstración nazi “Unite the Right” (“Unamos a la Derecha”) en Charlottesville, Virginia, alcanzó su apogeo mortal el sábado por la tarde cuando un admirador de Hitler de 20 años, oriundo de Ohio, condujo su automóvil contra una multitud de manifestantes opositores, asesinando a la joven de 32 años, Heather Heyer, una partidaria de Bernie Sanders, e hiriendo a 14 personas más. Seguir leyendo EEUU: La Casa Blanca y los disturbios fascistas en Charlottesville→