por Ibán de Rementería
El problema de la actual conducción del Partido Socialista, la Mesa, Camilo Escalona y otros miembros de su elite, es que ellos creen en la república pero no cree en la democracia. La república siempre es una república de partidos, en cambio la democracia siempre es una democracia de ciudadanos y ciudadanas. En la historia política universal solo la monarquía no permite partidos, es más en la tradición romana la República fue suprimida para instaurar el Imperio y así terminar con los partidos para que la nación unida fuese a la conquista del mundo. No se habla aquí de las modernas monarquías parlamentarias, que es de ciudadanos y partidos. El problema de la Mesa del Partido Socialista y en particular de su vicepresidente Camilo Escalona es que creen, como todos los partidos políticos en la República, pero no creen y desprecian, más aún le temen a la democracia, porque todas las élites le temen a la democracias. Veamos.