Hace seis décadas –esto es, tres generaciones– esta revista presentó un conjunto de argumentos sobre la sociedad y el Estado británicos peculiares y controvertidos en aquel momento y que han seguido siéndolo desde entonces . ¿Qué relación tienen, en su caso, con la coyuntura actual, que suele calificarse como un punto de inflexión en la historia del país? Para hacernos una idea de la cuestión, puede ser útil resumir brevemente las tesis originales esbozadas en la nlr a principios de la década de 1960 y sus resultados. Su novedad radicaba tanto en sus afirmaciones sustantivas, sobre las que se ha centrado principalmente el debate, como en sus pre- ocupaciones formales, que las distinguió de las formas de pensar sobre el Reino Unido habituales entre la izquierda y en otros ámbitos en aque- llos años. Cuatro características del planteamiento de la revista sobre el país eran nuevas, ya que este apuntaba a una totalización (natural- mente, esquemática) de su objeto, es decir, a una caracterización de las principales estructuras y agentes en juego, más que a una exploración de elementos parciales del mismo; trataba de situar el presente en una perspectiva histórica mucho más amplia que la habitual en los análi- sis políticos al uso; optaba por un marco analítico decididamente teórico, basándose en recursos entonces poco conocidos del marxismo continental, principalmente gramsciano; y, finalmente, impugnaba los hábitos típicos del socialpatriotismo, de izquierda o de derecha, folclórico o historiográfico, característico de la época.
Reino Unido
Gran Bretaña: un gobierno de mentirosos, ladrones y estafadores
por Alan Woods
Que hay una falsedad en su apariencia,
Debo negar y negaré:
Dicen que su Maestro es un bribón,
Y seguro que no mienten.
(Al oírlo afirmó la falsedad, de Robert Burns)
Últimamente, cada vez que veo las noticias de la noche en la televisión, el texto de Robert Burns «sobre la apariencia del Rev. Dr. Babington» por alguna razón viene a mi mente. Cada noche, los representantes oficiales del gobierno de Su Majestad desfilan solemnemente ante nuestras pantallas de televisión para presentarnos la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad sobre el lamentable episodio de la epidemia del coronavirus.
Thomas Piketty: Inglaterra, o cómo no abordar el problema
por Michel Husson
Thomas Piketty resume de este modo en el diario Liberationla tesis central de su libro Capital e Ideología: «Cada sociedad humana debe inventar un relato ideológico para justificar sus desigualdades» 1/. Pero, curiosamente, no aborda este tema en las páginas que dedica al Reino Unido.
Reino Unido y el cierre del Parlamento: Johnson en guerra contra los derechos democráticos
por Chris Madsen
La decisión del primer ministro Boris Johnson de suspender el Parlamento es un ataque histórico contra los derechos democráticos y un intento de imponer a la fuerza una agenda de brexit que tendrá consecuencias devastadoras para los trabajos y niveles de vida de la clase obrera.
Las Malvinas y la cuestión nacional, polémica marxista
Toda la humanidad actual, desde los obreros británicos a los nómades etíopes, vive atada al yugo del imperialismo. No hay que olvidarlo ni un solo minuto. (…) Algunos países son los conductores del imperialismo, otros sus víctimas. Esta es la línea divisoria fundamental de los estados y naciones modernos. Desde esta perspectiva, y solamente desde ella, hay que considerar el problema tan complejo de fascismo y democracia (…) tampoco podemos hablar del fascismo “en general”. En Alemania, Italia y Japón el fascismo y el militarismo son las armas de un imperialismo ambicioso, hambriento y por lo tanto agresivo. En los países latinoamericanos el fascismo es la expresión de la dependencia más servil del imperialismo extranjero. Tenemos que ser capaces de descubrir, bajo la forma política, el contenido económico y social.
León Trotsky
por Guillermo Crux
Razón y Revolución (RyR) está por publicar un libro sobre la guerra de Malvinas, de la cual está por cumplirse su 30 aniversario, llamado La izquierda y la guerra de Malvinas, que consiste de tres artículos publicados en distintos momentos sobre el tema, de Adolfo Gilly, Alan Woods y Alberto Bonnet, respectivamente, con un prólogo de Fabián Harari. De los cuatro, sólo este último pertenece al colectivo que publica RyR. Sin embargo, lo que une a los tres artículos con el prólogo de RyR, es una postura crítica hacia la actuación de la izquierda argentina durante la guerra, particularmente de las organizaciones que en ese entonces hablaban en nombre del trotskismo, como la corriente de Nahuel Moreno, el Partido Socialista de los Trabajadores (PST); y Política Obrera (PO), que más adelante, en ese mismo año de 1982, adoptaron el nombre de Movimiento al Socialismo (MAS) y Partido Obrero (PO), respectivamente. Pero la polémica también es con las organizaciones actuales que siguen reivindicando en general una postura determinada ante la guerra. A saber: que en un conflicto militar donde se enfrentan un bando semicolonial como Argentina, y una potencia imperialista como el Reino Unido, la posición de los revolucionarios debe ser ubicarse del bando militar de la nación semicolonial contra el imperialismo. Independientemente del régimen político de la primera, y sin darle ningún apoyo político al gobierno semicolonial, apuntando a transformar el conflicto en una verdadera guerra de liberación nacional contra el imperialismo. La conducción de la guerra por un gobierno como la dictadura genocida argentina, necesariamente está incapacitada para llevar esta guerra hasta el final. Una derrota del imperialismo inglés podría haber sido un gran factor revolucionario mundial, tras la debacle yanqui en Vietnam, y podría haber dificultado la ofensiva neoconservadora de los ’80.
Modelos de propiedad pública para un futuro cercano
por Michaels Roberts //
Acabo de asistir a una conferencia especial convocada por el Partido Laborista británico para analizar modelos de propiedad pública. El objetivo de la conferencia era desarrollar ideas sobre cómo podría un gobierno laborista desarrollar el sector público si gana las próximas elecciones generales.
Las elecciones británicas de crisis y las tareas de la clase obrera
por Chris Marsden//
Reino Unido fue a las urnas tras una campaña electoral sin igual. En el espacio de unas pocas semanas, una prevista victoria arrolladora por el Partido Conservador ha dado paso a especulaciones sobre una mayoría reducida, un Parlamento sin mayoría absoluta o incluso una victoria laborista.
Nos suena conocido: la crisis del Partido Laborista británico
El Partido Laborista nunca ha sido un partido socialista, pero siempre ha tenido socialistas, y por primera vez están en el asiento del conductor. Esto se ha reflejado en el manifiesto-programa del partido de 2017. Con el título “For the Many, Not the Few” (Para la Mayoría, No la Minoría)*, representa el máximo logro del corbynismo hasta la fecha y ofrece al pueblo británico la primera oportunidad en una generación de votar por políticas que significarían un cambio fundamental hacia la izquierda.
Ante el atentado en el Manchester Arena
por Osvaldo Costa
Desde el Porteño repudiamos de la manera más enérgica el brutal atentado del Manchester Arena, especialmente repugnante al estar dirigido contra una masa de adolescentes, incluidos niños y niñas.
Lo que los medios no dicen sobre las causas del Brexit
Vicenç Navarro
No hay pleno conocimiento y conciencia en las estructuras de poder político y mediático (que en terminología anglosajona se llama el establishment político-mediático) que gobiernan las instituciones de la Unión Europea, así como las que gobiernan en la mayoría de países que constituyen tal Unión, de lo que ha estado ocurriendo en la UE y las consecuencias que las políticas propuestas e impuestas por tales establishments han estado teniendo en las clases populares de los países miembros. Durante estos años, después del establecimiento de la Unión, se ha ido germinando un descontento entre estas clases populares (es decir, entre las clases trabajadoras y las clases medias de renta media y baja) que aparece constantemente y que amenaza la viabilidad de la UE.