por Gustavo Burgos
El Gobierno de Boric ha perpetrado el mayor ataque a los DDHH desde 1990, con la agenda de seguridad que a fardo cerrado aprobara ayer vergonzosamente el Senado. Ninguno de los gobiernos del régimen de los 30 años se atrevió a impulsar la conformación de un Estado policial como hoy se promueve con entusiasmo desde La Moneda. Lo hacen hoy día sin ningún escrúpulo y con la misma sonriente parsimonia con la que hablan de «las y los» ciudadanos mientras reponen el patrullaje policial con ametralladoras UZI.