por Eduardo Luque y Bashar Barazi
Israel vive la peor crisis interna desde 1948. Los gobiernos se suceden precipitadamente desde hace años. Israel vive inmerso en una crisis permanente. Tras cinco elecciones generales, los israelitas entronizaron la coalición liderada nuevamente por Benyamin Netanyahu. Pocos meses más tarde la población exige desde las calles la dimisión del gobierno. El 29 de diciembre Netanyahu formó un nuevo gabinete, el más derechista de la historia. Su objetivo fundamental es, como explicó en su primer discurso, expandir los asentamientos expulsando a la población palestina. Recupera el sueño acariciado por Ariel Sharon. Para cumplirlo, Netanyahu quiso introducir profundas modificaciones legales que empujan al país hacia la dictadura.