por Benjamin Mateus
La magnitud de la devastación humana causada por la pandemia de COVID-19 está emergiendo con mayor claridad a medida que científicos y epidemiólogos estudian minuciosamente los datos disponibles y extraen conclusiones cuando faltan datos. Un importante estudio publicado la semana pasada reveló que el COVID-19 fue una de las principales causas de muerte en 2020 y la principal causa de muerte en 2021 a nivel mundial, por delante incluso de la cardiopatía isquémica, que mató a 8,9 millones de personas en 2019, y del cáncer, que mató a 9,5 millones en 2018.