por Johannes Stern
Alemania desempeña un papel destacado en la guerra por delegación de la OTAN contra Rusia y acepta por lo tanto el riesgo de una tercera guerra mundial. La declaración gubernamental del canciller federal Olaf Scholz ante el Parlamento Federal el jueves por la mañana y el debate subsiguiente dejaron claro la agresividad con la que se comporta el imperialismo alemán una vez más, 77 años después del final de la Segunda Guerra Mundial.