Hace unos cuantos documentos atrás señalábamos, al tratar de sintetizar la situación política, que la crisis del régimen se podía explica de la siguiente manera; “la burguesía no puede y la clase trabajadora no sabe”. Este fue un acierto expositivo y analítico, sin embargo, amerita una explicación más profunda, producto de que los factores en juego en la crisis política del régimen y la situación, son altamente inestables.
Ha quedado muy claro que los últimos seis meses, en cuanto a la pandemia del Covid-19, ha sido una crónica de una muerte anunciada, es decir de un desastre sanitario que se incubo, maduro y ha comenzado a dar muestras de sus brutales efectos.
El gobierno de Piñera una vez más ha demostrado su profunda incompetencia, tanto en el ámbito administrativo (planificación, dirección y gestión) como en el político, con lo que se ha convertido en una amenaza real para el pueblo trabajador.