por Gustavo Burgos//
Las últimas dos semanas han constituido una verdadera prueba para todos los sectores, tendencias y corrientes políticas. Efectivamente, el país se ha polarizado, han emergido las verdaderas posturas de algunos, otros han guardado un hermetismo “bastante parecido a la estupidez”, y en el centro de todo una vez más Pinochet. Su imprevista y sorpresiva detención en Londres ha puesto de manifiesto la verdadera cara del régimen.
Un hecho como la detención del Dictador, de profundas raíces en la política chilena, y mundial, nos entrega en una primera lectura algunas cuestiones fundamentales: