por George Souvlis
Pocos y pocas profesionales de la historiografía podrían competir con Perry Anderson en lo tocante a la habilidad para escribir con inteligencia sobre cuestiones tan dispares como la antigua Grecia, la cultura y la teoría política y la actualidad en países que van desde Brasil hasta Italia. La erudición del historiador británico le hace sobresalir en el mundo de las letras, pero lo mismo ocurre con su compromiso durante toda su vida con la política socialista. En efecto, la mayoría de las apreciaciones de Anderson se centran en este último aspecto y no indagan tanto en los argumentos históricos y las bases epistemológicas que informan sus estudios.