Este libro de Otto Rühle expone de una manera compacta las doctrinas económicas fundamentales de Marx. Después de todo nadie ha sido todavía capaz de exponer la teoría del trabajo mejor que el propio Marx.I
Algunas de las argumentaciones de Marx, especialmente en el capítulo primero, el más difícil de todos, pueden parecer al lector no iniciado demasiado discursivas, ociosas o “metafísicas”. En realidad, esta impresión es la consecuencia de no tener la costumbre de considerar de una manera científica los fenómenos familiares. La mercancía se ha convertido en una parte tan universalmente difundida y tan familiar de nuestra vida diaria que ni siquiera se nos ocurre considerar por qué los hombres ceden objetos importantes, necesarios para el sostenimiento de la vida, a cambio de pequeños discos de oro o de plata que no se utilizan en parte alguna de la tierra. El asunto no se limita a la mercancía. Todas y cada una de las categorías de la economía del mercado parecen ser aceptadas sin análisis, como evidentes por sí mismas, y como si fueran las bases naturales de las relaciones humanas. Sin embargo, mientras las realidades del proceso económico son el trabajo humano, las materias primas, las herramientas, las máquinas, la división del trabajo, la necesidad de distribuir los productos terminados entre los participantes en el proceso de producción, etcétera, las categorías como mercancía, dinero, salarios, capital, ganancia, impuesto, etcétera, son únicamente reflejos semi-místicos en las cabezas de los hombres de los diversos aspectos de un proceso económico que no comprenden y que escapan a su control. Para descifrarlos es indispensable un análisis científico completo.