por Raúl Román
Cual ebrio que terminará por caerse, Piñera extiende su agonía, tratando de asirse de espejismos políticos, que por su propia desesperación levanta como fugaces experiencias que sólo aceleran su derrotero, quedando ante si, el vacío.
Cual ebrio que terminará por caerse, Piñera extiende su agonía, tratando de asirse de espejismos políticos, que por su propia desesperación levanta como fugaces experiencias que sólo aceleran su derrotero, quedando ante si, el vacío.