por Cristián Garay Vera //
El cine político tiene muchas facetas según la sociedad y el contexto nacional o internacional. La advertencia es necesaria porque, a primera vista, parece que estamos solo ante un filme más sobre Irak y el tema de los contratistas. Pero en realidad, estamos frente a una potente denuncia del actuar de las compañías privadas de seguridad, que participan con inmunidad jurídica de la violencia armada en ese país protegiendo bienes y civiles de alto rango, y también gestionando operaciones de seguridad.