por Aníbal Ricci
Película circunscrita al género de las fugas carcelarias, destinada al consumo del espectador que busca entretención de su visionado. Lejos del espesor dramático de cintas como Fuga de Alcatraz (Don Siegel), Papillon (Franklin Schaffner), Sueños de fuga (Frank Darabont), El gran escape (John Sturges) y Expreso de medianoche (Alan Parker), la chilena Pacto de fuga toma prestado el cascarón de este tipo de películas (planificación, estrategia para reducir escombros y un póster de chica desnuda para despistar a los gendarmes). En la anécdota es demasiado similar a Sueños de fuga (1994), aunque su reconstitución de época sea sobresaliente, situándose a la altura de producción que se espera de este género.