13 rosas rojas: que sus nombres no se borren en la historia

por Julio Gálvez Barrraza

El 4 de agosto de 1939, mientras el «Winnipeg» zarpaba de Trompeloup con más de dos mil refugiados españoles con destino a Valparaíso, la prensa derechista chilena atacaba duramente el asilo otorgado a los republicanos. Si los refugiados no hubieran cometido crímenes ni delitos no huirían hoy de la justicia de Franco, ni hubieran tenido que salir de España. Esta aseveración se caía al momento; en la España de la posguerra, en la España de Franco, los fusilamientos a los vencidos era el pan de cada día.

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