por Ekain Gómez de Segura
Estamos viviendo en una continua crisis. Una crisis tras otra, característica inherente al capitalismo. En esta ocasión nos encontramos frente a una crisis humanitaria. Tenemos, en mitad del Mediterráneo, una enorme nave con 134 inmigrantes a bordo. Unos inmigrantes que huyen de la miseria y las guerras que sufren sus países; lo único que desean es poder vivir en paz dignamente, y ya que en sus países es imposible, huyen a otros con el propósito de encontrarla.