. . .Se está viviendo una hora dura y amarga para el proceso revolucionario chileno, porque ayer hemos perdido una batalla en la gran guerra que libra el pueblo por su libera- ción y por su independencia.
Se ha entregado el canal 9 de televisión y los trabajadores de la industria ex-Sumar fueron víctimas de una brutal provocación por parte de la FACH; hace unos días muere en el hospital de Carahue, víctima de torturas y flagelaciones, un campesino de Temuco: