por Francisca Skoknic y Alberto Arellano
Alcogal creó seis sociedades en las Islas Vírgenes Británicas para el abogado Óscar Aitken, quien las utilizó para ocultar el patrimonio de Augusto Pinochet y recibir pagos como intermediario en la venta de armamento. Luego de que en 2004 la justicia chilena comenzara a investigar estas sociedades, Alcogal debió dar explicaciones a la fiscalía panameña, negando haber sabido que Aitken era un testaferro de Pinochet. Según uno de los socios de la firma, este ha sido uno de los episodios más incómodos en la historia del bufete. Así lo detallan documentos publicados en Pandora Papers, una investigación del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) y cuyo capítulo chileno fue realizado por CIPER y LaBot.