por Katia Chornik//
Al asumir el control del país el 11 de septiembre de 1973, el General Augusto Pinochet estableció más de mil centros de detención política. Decenas de miles de personas estuvieron recluidas en esos recintos, sin derecho a juicios justos o garantías judiciales elementales. La gran mayoría sufrió serias formas de tortura física y sicológica por parte de las Fuerzas Armadas, Carabineros, Policía de Investigaciones, Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) y Central Nacional de Informaciones (CNI). Miles fueron asesinados, sus cuerpos hechos desaparecer (2).