por Celso Calfullan
El acuerdo al que llegaron Chile Vamos, la ex Concertación y el Frente Amplio desde un principio fue elaborado como una trampa para que el pueblo no pueda realmente participar y solo lo pueda hacer formalmente.
Toda la casta política quería frenar la posibilidad que los que salieron a las calles durante la revuelta popular pudieran llevar a cabo los cambios que requiere este país. En lo primero que pensaron para ponerse de acuerdo fue precisamente en cuál era la mejor forma para frenar las demandas que tiene el pueblo.