por Patricio Guzmán
Vivimos “tiempos interesantes”, el Partido del Orden en las cuerdas se reagrupa tratando de reeditar la política de los consensos de las primeras décadas de la transición que permitió el cogobierno de facto entre la derecha pinochetista y la Concertación, garantizando la gobernabilidad, la estabilidad del régimen y la profundización del capitalismo neoliberal salvaje convirtiendo a Chile en un país con gran crecimiento económico que incluso fue aceptado en el club exclusivo de los países capitalistas ricos de “Occidente”, la OCDE. Pero todo ello basado en un modelo económico depredador del ser humano y la naturaleza, con una concentración de la riqueza creciente, con salarios bajos, pensiones miserables y excluyente de las mayorías sobre endeudadas.