Los estudios de Bachofen [1], Morgan [2] y otros parecen demostrar que la opresión social de la mujer coincide con la aparición de la propiedad privada. La contradicción, en el seno de la familia, entre el hombre en cuanto a poseedor y la mujer en cuanto a no-poseedora constituye la base de la dependencia económica y de la situación social de defraudación de los derechos del sexo femenino. Según Engels, en esta última situación radica una de las primeras y más antiguas formas de dominio clasista. Engels afirma que: «En la familia el marido es el burgués y la mujer representa el proletariado.» [3] Todavía no se podía hablar en aquel momento de cuestión femenina en el moderno sentido de la palabra. Solamente el modo de producción capitalista ha provocado los trastornos sociales que han dado vida a la cuestión femenina moderna; ha hecho pedazos la antigua economía familiar que en el período precapitalista garantizaba a las grandes masas del mundo femenino un medio de sustento y un sentido a su vida. Parecería insensato aplicar a la actividad desarrollada por las mujeres en la antigua economía doméstica aquellos conceptos negativos de miseria y de angustia que caracterizan la actividad de las mujeres de nuestros días. Mientras subsistió la antigua forma familiar, la mujer encontró en la misma su sentido en la actividad productiva que desarrollaba, y por ello no era consciente de que estaba privada de todos los derechos sociales, a pesar de que el desarrollo de su individualidad estaba fuertemente limitado.
mujer trabajadora
¿Es el trabajo doméstico no remunerado?: de cómo una premisa falsa conduce a una posición reaccionaria
por David Rey
Al calor del auge del movimiento feminista y de las luchas contra la opresión de la mujer, sectores de la izquierda y del propio movimiento feminista han vuelto a rescatar la idea del “salario para el ama de casa” y a calificar el trabajo doméstico realizado por el ama de casa como un trabajo “no remunerado” que se ahorran los capitalistas ¿Cuál es la posición del marxismo sobre esto?
El 8M noqueó a Piñera: vuelve a plantearse la necesidad de un Paro Nacional
por El Porteño
La maciza manifestación de fuerza del movimiento feminista el día de ayer tumbó los planes gubernamentales de desmovilización. Con lo de ayer las patotitas fascistas huyeron a esconderse a sus rediles y sí, efectivamente le llegó Marzo a Piñera y de la peor manera: con más de un millón de movilizados en Plaza Dignidad de Santiago y otro millón inundando las calles de todas las ciudades del país. En Valparaíso, sólo en el puerto, más de 50.000 manifestantes -en su mayor parte mujeres- salieron a reivindicar la causa de la Mujer y a poner de manifiesto que esta reivindicación se inscribe en el marco de la lucha en contra del gobierno criminal piñerista. Y esto aún no ha terminado, las movilizaciones seguirán esta jornada planteada como paralización laboral.
109 años de la masacre de Nueva York: el día de la mujer trabajadora
por El Porteño
El 8 de marzo es el día de la Mujer Trabajadora, explotada, oprimida por el régimen capitalista. Por lo mismo reivindicamos con él la lucha de la mujer como una parte sustancial de la lucha del conjunto de los explotados por su emancipación. Esta liberación sólo podrá materializarse con el triunfo de la clase obrera, que permitirá liberar a la mujer de la esclavitud del trabajo doméstico (cuidado de los hijos y mantención del hogar), de la opresión en su vida sexual y en el ejercicio de sus derechos políticos. Materializar este objetivo supone expulsar del poder a la burguesía y acabar con el capitalismo.
El feminismo y la mujer trabajadora (El Porteño en Portales Nº9)
Discusión sobre la situación de la mujer trabajadora y el papel de ésta en las transformaciones sociales. Las movilizaciones que se han desarrollado y lo que viene. Un enfoque de la liberación femenina como parte de la lucha contra explotación.
Conducción: Cynthia Burgos;
Panelistas: Janet Santibáñez y Marcela Bustamante;
Invitada: Gislaine Barría.